En una vibrante y alegre ceremonia en la Basílica Redentorista de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Brooklyn, treinta y nueve feligreses de los grupos hispano e inglés fueron oficialmente inscritos como Asociados en la Misión Redentorista. El acto tuvo lugar en la Fiesta Titular de la Congregación, la Solemnidad del Santísimo Redentor, marcando un hito significativo en la vida de estos nuevos asociados y en la misión de la comunidad redentorista.
La ceremonia contó con notas de felicitación de notables personalidades de la Congregación Redentorista. El Padre Cristian Bueno, C.Ss.R., director de la Oficina de Evangelización en Roma, extendió sus más sinceras felicitaciones. El P. Francis Gargani, C.Ss.R., Copresidente de la Conferencia Norteamericana de Colaboradores en Misión, y Anne Walsh, Coordinadora de Colaboración en Misión de los Redentoristas de Norteamérica, también enviaron sus calurosos deseos. Anne Walsh destacó la importancia de esta celebración, señalando que estos nuevos asociados son las últimas incorporaciones a la familia redentorista mundial. Hizo hincapié en que, si bien esta ceremonia marca la conclusión de su formación inicial en la espiritualidad y el carisma redentorista, también significa el comienzo de un compromiso de por vida y la pertenencia a la comunidad redentorista. Como parte de la ceremonia, se pronunció el nombre de cada candidato, y ellos respondieron con un «Aquí estoy», significando su aceptación y dedicación a la misión redentorista. Los nuevos asociados recibieron una bendición y la cruz redentorista, símbolo de su nuevo protagonismo en la misión redentorista. Seis Redentoristas activamente envueltos en la formación, colocaron las cruces: Lucy McNamara, Misionera Laica del Santísimo Redentor, que ha acompañado a los grupos desde el principio, el Padre Karl Esker, C.Ss.R., también fotógrafo del evento, el Padre Edmundo Molina, C.Ss.R., el Padre Kevin Moley, C.Ss.R., EL Padre Ruskin Piedra, C.Ss.R., y el Padre Manuel Rodríguez, C.Ss.R. Después de la ceremonia en la Iglesia, se celebró una recepción en el Salón Parroquial. Aquí, los nuevos asociados recibieron sus certificados firmados y posaron para fotografías con sus familias y amigos, captando la alegría y el significado de la ocasión. La celebración concluyó con un almuerzo preparado por los asociados, que puso aún más de relieve el espíritu de comunidad y la alegría compartida del acontecimiento. Esta ceremonia marcó un hito, fue una celebración de nuevos comienzos para los treinta y nueve asociados y fue un testimonio de la misión duradera y en expansión de la Basílica de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. El acontecimiento promete vigorizar los esfuerzos de evangelización de la Basílica, marcando un nuevo capítulo lleno de esperanza y dedicación. Esto es un testamento al papel significativo de la Basílica en la misión de la Provincia redentorista, una fuente de orgullo e inspiración para todos nosotros. †