Esther C:12, 14-16, 23-25; Psalm 138; Matthew 7:7-12
Today’s Gospel about persistence in prayer—to ask, seek, and knock—is not about wearing God down and getting him to come around to our way of seeing and doing things but rather about getting us to come around to his way. We’ve had the experience of praying about something and not getting it. So why keep asking?
We’re called to change our focus and make prayer less about us and more about God: to make the Lord the center of all we are and do.
When we go to pray, let’s pray not so much to get what we want but what God wants. That moves us beyond ourselves, beyond our concerns and cares, which are valid and have a time and place but are only a part of that grand, cosmic design the Lord very much wants to bring to completion.
It all comes down to what we probably say every day: “Thy kingdom come, thy will be done.” Let’s hope that’s what we want more than anything. So we keep on asking, seeking, knocking, and praying for it.
Father Mark Wise, C.Ss.R.
Newton Grove, N.C.
Ester C:12, 14-16, 23-25; Salmo 138; Mateo 7:7-12
El Evangelio de hoy sobre la perseverancia en la oración—pedir, buscar y llamar—no tiene que ver con cansar a Dios y hacer que se adapte a nuestra manera de ver y hacer las cosas, sino con hacer que nosotros nos adaptemos a su manera de ver y hacer las cosas.
Todos hemos tenido la experiencia de rezar por algo y no conseguirlo. ¿Así que, por qué seguir pidiendo?
Debemos cambiar nuestro enfoque y hacer que la oración tenga que ver menos con nosotros mismos y más con Dios: hacer del Señor el centro de todo lo que somos y hacemos.
Así que, cuando vayamos a rezar, ¿por qué no probamos esto? Oremos no tanto por conseguir lo que queremos nosotros, sino lo que quiere Dios. Eso nos hace salir de nosotros mismos, de nuestras preocupaciones e inquietudes, que son válidas y tienen su momento y su lugar, pero que son sólo una parte de ese grandioso diseño cósmico que el Señor quiere llevar a cabo.
Todo se reduce a lo que probablemente decimos cada día: “Venga tu reino, hágase tu voluntad”.
Esperemos que eso sea lo que queremos más que nada. Así seguiremos pidiendo, buscando, llamando y rezando por él.
Padre Mark Wise, C.Ss.R.
Newton Grove, N.C.
¡Obtenga nuestro folleto de Cuaresma ahora, gratis!